miércoles, 28 de noviembre de 2012

Sin rumbo, pero juntos


Cuando el peso de lo vivido nos encorva, cuando la monotonía del presente y la ausencia de un horizonte atractivo nos abate, sólo el aferrarse a un compañero de viaje y la seguridad de no sentirse olvidado nos hace seguir caminando.

miércoles, 21 de noviembre de 2012

Amargura Coronada


... y baja cada año, y se pone a nuestra terrenal altura, y pasa algunos días y noches a la espera de quien le quiera implorar, contemplar, adorar, agradecer o compartirle sus secretos, dolores y alegría más íntimas... Cada año parece que es igual, y puede que lo parezca, pero no lo es en el corazón de cada uno.

domingo, 18 de noviembre de 2012

La llama de la libertad


Llevamos un año lleno de conmemoraciones, de recuerdos idealizados de una época en la que se colocó una semilla para las sociedades libres y democráticas.
Obviamente, no sería todo tan binito como nos lo pintan aunque es evidente que fue un hito importante, una semilla o un precedente en la creación de sociedades más justas en occidente. ¿Y debemos celebrar este bicentenario?

lunes, 12 de noviembre de 2012

Intemporal


Dentro de un mundo en el que todo es pasajero, en el que toda lo que se construye a nuestro alrededor carece de belleza, gusto y al poco tiempo los deshechamos y tiramos abajo, que existan hoy en día lugares como este, es un gran regalo infravalorado para nuestra civilización.
No deja de ser sorprendente  que bajo la tierra de un sencillito pueblo de nuestro país, exista una maravilla como ésta esculpida en piedra y lleve así, intacta casi mil años.
Y si sorprende lo que evidencia la roca labrada y el enclave, ¿cuánto nos sorprendería saber la historia que encierran sus paredes?

sábado, 3 de noviembre de 2012

Difuntos



Ayer fue el día de los difuntos. Un día de culto a los que se fueron, de visitas a los cementerios, de misas en recuerdo de..., de comprar flores. Todo esto mezclado con una gra variedad de tradiciones, algunas de ellas ancestrales que se celebran en cantidad de poblaciones de nuestro país.
La realidad es que la media de edad de las personas que siguen estas supuestas tradiciones nuestras en las ciudades debe andar por encima de la de jubilación.