jueves, 16 de mayo de 2013

Homofobia y otras fobias


Hoy es el día mundial contra la homofobia. Si, parece increíble que tengamos que pensar que eso existe. En general, es alucinante que todavía haya personas que sientan, no ya un prejuicio, un etiquetado de otro semejante, sino que llegue al término de fobia, de odio hacia otro ser humano por su condición, sea esta cua sea, si que haya algun acto que directa o indirectamente nos afecte a nosotros.
Pues si, los homosexuales siguen sufriendo, y según qué sitios más aún, auténtico desprecio por el simple de que se sospeche que lo son. Es abominable que esto se produzca, pero por desgracia ocurre con otras irracionales lacras con el machismo exacerbado, el racismo repugnante, o la cruel violencia infantil.

Vamos de sociedad avanzada en España, pero estamos más cerca de comportamientos en países analfabetos o radicales religiosos.
Pero no nos engañemos, existe una reacción en ocasiones carente de sentido y de consecuencia en algunos sectores, supuestamente defensores de estos colectivos castigados. Éstos grupos teóricamente  defensores de la libertad y el progreso y que después proclaman ese mismo odio burdo y  estúpido hacia colectivos que consideran sus enemigos. Todos estos que se manifiestan en el ataque sistemáticos contra hombres separados desde un feminismo descerebrado, contra cualquier creyente desde una ateísmo irrespetuoso y que no sabe distinguir entre jerarquías y pueblo llano que hace el bien, contra padres por medio de madres despechadas y vengativas sobre sus ex parejas usando los hijos si los hubiere derogar medio, etc. 
En definitiva, hay colectivos históricamente discriminados y repudiados que deben ser tratados con normalidad y respeto pero, oiga sus defensores más acérrimos, respeten a todo el mundo,no etiqueten ni generalicen porque caen enlas mismos primitivos comportantamientos, igualmente repulsivos.
Que bonito sería que nos aprendiésemos a tratarnos como iguales, aceptando nuestras diferencias de forma y pensamiento, sin agredir de ninguna a manera a nuestro semejante. Hoy por hoy, una utopía.
Las fobias solo con los insectos, y no precisamente mariquitas.

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