Ahora que miramos tanto al norte como modelo de muchas cosas, de prosperidad, de honradez, de educación, de tecnología, etc. Ahora que muchos quieren irse a vivir arriba, donde dicen que se vive mejor...
Yo me reivindico ser del sur, con esa música que nos acompaña desde la más tierna
infancia, con esa cercanía y ese calor entre las personas que sentimos desde niños y con ese apego a nuestra familia que solo se aprende y se mama por aquí.
Para otra cosa somos un desastre, pero para el arte y el cariño somos únicos, cuando somos gente bien.
Y más arte arte que escucha en su casa el chiquillo que se cría en los brazos de la foto, es complicado encontrar.
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